El juez pone en libertad al joven que hackeó las bases de datos de los juzgados en España
El juez de la Audiencia Nacional José Luis Calama ha decretado libertad para el joven hacker de 18 años, conocido como Alcasec, según ha podido saber OKDIARIO por fuentes judiciales. El joven fue detenido como presunto autor del ciberataque sufrido el pasado mes de octubre de 2022 en el Punto Neutro Judicial, el sistema de comunicación gestionado desde el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) que permite centralizar y trasladar peticiones de información entre los órganos judiciales y la Agencia Tributaria, la Policía o el Instituto Nacional de la Seguridad Social.
El juez le investiga por haber accedido presuntamente a la base de datos del Consejo y a los datos bancarios de 575.186 personas y empresas. Esos datos habrían sido presuntamente vendidos a terceros, en concreto a dos empresas en Lituania. En una entrevista realizada hace un año en el canal de Youtube Club 113 le preguntaron por qué no había atacado a RTVE y contestó que «es del Estado y ahí está metido el CNI», pero, sin embargo, se metió en los ordenadores que guarda la Justicia.
El ciberataque fue efectuado gracias a las claves de dos funcionarios de Justicia de Bilbao, cuyos passwords obtuvo el joven. De esa manera accedió al Punto Neutro Judicial (PNJ) del CGPJ, que conecta los juzgados con otros organismos, como cuentas de bancos donde se depositan fianzas, multas económicas, etc. y sus cuentas de origen. Esos datos habrían supuesto unos ingresos de 553.707 dólares en criptomonedas. Entre los datos expuestos también algunos relativos a la Agencia Tributaria de contribuyentes españoles.
Pero todos los movimientos en Internet dejan huella y los miembros de la Brigada de Ciberdelitos de Policía Nacional están entre los mejores del mundo. A pesar de ello, les ha costado cinco meses desencriptar los datos y seguir las pistas hasta llegar a Huertas. El joven detenido utilizó presuntamente estos datos robados para crear una base de datos concebida que bautizó como Udyat. En una entrevista concedida hace un año al Canal de Youtube Club 113 contaba cómo había hackeado los ordenadores de Mediaset por error, ya que su intención era hackear los de La Sexta, después de que el jefe de Investigación de la cadena contase la historia de una de sus primeras detenciones y su puesta en libertad.
El juez de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional José Luis Calama, ha decretó para él prisión provisional el pasado mes de abril, comunicada e incondicional por delito continuado de revelación de secretos. El auto de prisión recogía que Huertas se enfrenta a penas de cárcel de más de cinco años y dispone de acceso a «importantes cantidades de criptomonedas que le permitirían disponer de liquidez suficiente para residir en cualquier parte del mundo» que facilitarían su huida. El juez también dice que la prisión se dicta por riesgo de que «el investigado dañe los elementos de prueba existentes contra él, manipulando los repositorios informáticos donde tiene depositados los datos objeto de su actividad delictiva». Pero, este martes le ha dejado en libertad, según ha podido saber OKDIARIO.
Conocido de la Policía
El joven es un conocido de la Policía ya que comenzó su carrera de hacker con sólo 15 años. Sus primeras víctimas fueron el canal HBO, luego Bicimad, el servicio de alquiler de bicicletas de Madrid, y Burger King. Fue ingresado en régimen cerrado en un centro de menores, pero salió al cumplir los 18 años. Entonces hackeó Mediaset por error, como el mismo hacker contó, porque en realidad quería entrar en La Sexta. En Mediaset obtuvo una tarjeta a nombre de Paolo Vasile, entonces consejero delegado de la compañía, se la puso en su móvil y empezó a gastar, pero alguien se dio cuenta cuando los gastos llegaron a 300.000 euros.
Sus últimas hazañas fueron colarse en las bases de datos de la Policía Nacional y del Ministerio del Interior, donde incluso accedió a su propio expediente. También presuntamente hackeó el Ayuntamiento de Granada y de Fuenlabrada, desviando unos 53.000 euros a dos cuentas bancarias. Alcasec, y expidió varios carnés de conducir de la Dirección General de Tráfico (DGT) sin pasar el preceptivo examen.
Según la nota de Prensa de la Policía, el hacker llevaba una vida de lujo sin actividad laboral reconocida, realizaba viajes caros, vestía marcas exclusivas, frecuentaba lugares de ocio y restauración de moda e incluso conducía un vehículo de alta gama. Entre sus amistades se encontraba Francisco Nicolás Gómez Iglesias, el pequeño Nicolás.
Durante la operación policial, los agentes registraron el domicilio y un local del hacker detenido, donde intervinieron una gran cantidad de dinero en efectivo, numerosa documentación y efectos y soportes informáticos que están siendo analizados todavía por los investigadores. En la prisión le han prohibido acercarse a ningún ordenador.